Tengo la sensación de que me pierde el impulso, ¿no?
Como si todo alrededor se moviera tan rápido que el tiempo se detuviera.
A veces me sorprenden las tonterias que salen de mi boca por eso cuando hablo de vete a saber qué, dejo que mis ojos deambulen por la sala mientras mi boca libera pensamientos que se desprenden de mi cerebro y ruedan por mi lengua como si fueran caramelos, imagino las cosas de mi vida que no fueron posibles... y las que hubieron podido serlo.
La suerte no tienen nada que ver. Todo esta predestinado. El destino manifiesto no se puede detener. El tiempo tampoco, como no se puede pretender que los ocenaos inunden la tierra o que la luna se aleje de su orbita.
La suerte no tiene nada que ver con NADA.
No hay comentarios:
Publicar un comentario